jueves, 17 de febrero de 2011


No sé lo que quiero hoy, ni lo que querré mañana. Realmente no sé si soy feliz con lo que tengo o con lo que dejo de tener, si tengo lo que quiero o sólo quiero lo que tengo. No sé si voy por el buen camino o me torcí hace tiempo. Pero puedo decir sin dudas que disfruto de mi vida, que no voy a pensar en el futuro ni en el día de mañana. Puede que dentro de algunos años mi vida cambie radicalmente y mi mundo tal y como es ahora deje de tener sentido. Por eso quiero salirme del camino, hacerle caso al corazón y no a la razón. Porque me gusta mi mundo tal y como es ahora y quiero aprovecharlo por si se derrumba. Quiero equivocarme, como ya he hecho varias veces desde que propuse no hacerlo y dejar de escuchar eso de: ¿has pensado en lo que puede pasar después? Pues no, no lo he hecho y no me da la gana de hacerlo.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Si te demuestra día a día que eres tú o ninguna, no lo dejes escapar.


Ahora lo entiendo, yo no te perdí, me perdiste a mi.


Después de amores soñados, y otros tantos olvidados. Después de personas increíbles. De ideales, sueños y metas. Después de caerme mil veces y levantarme dos mil. Después de llorar, y de reir más aún. Después de tantas desilusiones, pero a la vez tantas ilusiones. Después de lamentar, pero también de sonreír. Después de lamentar la ausencia de todas aquellas personas que pasaron por tu vida, y gritar de euforia por las que aún siguen aquí. Después de todo, el mundo me sigue quedando grande. O puede que yo, sea muy pequeña.
Por que a fin de cuentas, los miedos, están para superarlos.
Me enseñaste a querer, pero no a olvidar.

Prométeme que mañana me querrás más que hoy, que seré en quien pensarás día y noche, que todos tus te quieros serán solo para mí y que nunca me vas a dejar sola. Prométeme que no irás por delante o por detrás de mí, si no a mi lado; que solo me besarás a mí y que seré la dueña de tus labios. Prométeme que cada vez que caiga tú estarás ahí para ayudarme a ponerme en pie; prométeme que nunca olvidarás cada momento que vivamos. Pero sobre todo, prométeme que cumplirás todas y cada una de tus promesas.



Ahora es el momento de ponerse guapa, no por todo el que venga, si no por todo aquel que pudo tenerte y no te tuvo.

martes, 15 de febrero de 2011

Sí, estoy sonriendo, pero tranquilo, que ahora tú no eres el motivo.


No te hagas la estrella, porque en mi cielo ya no brillas.
No me prometas la luna, porque viniendo de ti no la quiero.

He perdido demasiado de mi valioso tiempo contigo, pero no estoy dispuesta a perder ni un solo segundo más, ahora es cuando te digo adiós.

-Te quiero
+Y yo a ti
-No, perdona, no me has dejado terminar la frase, te quiero lejos de mi.
Te encontré, sin saber que te buscaba.

-¿Si te pido que me prometas algo, lo harás?
+Sí, claro, dime
-Prométeme que no me soltarás nunca.

-Dime, ¿Qué necesitas tú para ser la persona más feliz?
+Pues, necesito tener mucho dinero, para así tener todos los caprichos que se me pasen por la cabeza. Necesito tener todo lo que quiero, y verme rodeado de muchísima gente que me quiere.
- ...
+Y tú, ¿Qué necesitas?
-Yo tan solo te necesito a ti.


Olvidar: 7 letras, 3 sílabas, un reto imposible para muchos.